Entre los problemas de salud más comunes, los de la tiroides pueden ser difíciles de identificar. Los síntomas son sutiles y se confunden fácilmente con otras dolencias. De hecho, es fácil descartar muchas de las señales de advertencia como efectos secundarios de una vida ajetreada en el siglo XXI. Esto significa que muchas personas viven con problemas de tiroides durante años sin siquiera darse cuenta.

La tiroides es una glándula situada en la garganta humana, cerca de la tráquea. Esta glándula libera dos hormonas en el cuerpo. La triyodotironina (también conocida como T3) proporciona al cuerpo tiroxina (o T4), que también es liberada directamente por la glándula tiroidea. Estas hormonas son esenciales para un conjunto de órganos sanos, activos y plenamente funcionales.

A veces, la glándula tiroides no funciona adecuadamente. Los problemas de tiroides son muy comunes, especialmente en las mujeres. Las mujeres tienen hasta veinte veces más probabilidades de sufrir problemas de tiroides que los hombres. Estos problemas de salud también pueden ser hereditarios.

Los problemas más comunes relacionados con la tiroides son el hipertiroidismo, que es una tiroides hiperactiva, o el hipotiroidismo, una tiroides poco activa. Estas afecciones suelen empezar a manifestarse en la edad adulta, entre los 20 y los 40 años. Sin embargo, pueden presentarse en los bebés. A los recién nacidos se les hacen pruebas muy tempranas para detectar signos de hipotiroidismo. Si no se trata, esta enfermedad puede provocar retrasos en el desarrollo físico o mental.

 

Síntomas e impacto del hipertiroidismo

Si tiene una tiroides hiperactiva, su cuerpo liberará cantidades excesivas de triyodotironina y tiroxina. Esto puede conducir a una serie de síntomas, incluyendo:

  • Inquietud, sensación de ansiedad e irritabilidad.
  • Temblores musculares.
  • Cuello hinchado o agrandado.
  • Palpitaciones del corazón, o una frecuencia cardíaca elevada en reposo.
  • Sensibilidad al calor y sensación de calor todo el tiempo.
  • Pérdida de peso repentina e inexplicable.
  • .

Si tiene estos síntomas, pida cita con su médico de cabecera para que le haga un análisis de sangre. Por lo general, esto revelará un exceso de hormonas en la sangre. A continuación, se puede elaborar un plan de tratamiento. En algunos casos, puede ser necesario realizar más pruebas. El tratamiento dependerá de la causa del hipertiroidismo.

 

Causas y tratamiento del hipertiroidismo

En la mayoría de los casos, la enfermedad de Graves causa el hipertiroidismo. Se trata de un trastorno autoinmune, en el que el sistema inmunitario confunde la glándula tiroides con un intruso y la ataca. Sin embargo, en algunos casos, el hipertiroidismo es un efecto secundario de la medicación para tratar otras enfermedades. Los tratamientos para la frecuencia cardíaca irregular suelen estar relacionados con el hipertiroidismo. Los nódulos en la garganta también pueden provocar esta enfermedad.

Si sospecha que padece hipertiroidismo, acuda a su médico. Si se detecta a tiempo y se trata adecuadamente, esta afección no tiene por qué ser una gran preocupación.

En su caso, su médico le recetará tionamidas. Son medicamentos que controlan la producción de hormonas de la glándula tiroidea. El propiltiouracilo y el carbimazol son las prescripciones más comunes. Deberá tomar estos medicamentos de por vida.

Si la medicación no ayuda, es posible que necesite una intervención quirúrgica. Esto será para poder extirpar parte de la glándula tiroidea. Esto, a su vez, reducirá el número de hormonas producidas. Otra alternativa es el tratamiento con radioyodo. Se trata de una forma de radioterapia que destruye elementos del tiroides y reduce la capacidad de liberar hormonas.

Un profesional de la salud analizará con usted sus opciones. Juntos podrán decidir el plan de tratamiento ideal para su tiroides hiperactiva. Una vez controlada la enfermedad, podrá llevar una vida normal, plena y sin obstáculos.

 

Síntomas e impacto del hipotiroidismo

A veces, la glándula tiroides no libera suficiente triyodotironina y tiroxina. Como estas hormonas son fundamentales para el organismo, su ausencia se notará. Sin embargo, el hipotiroidismo no provocará un fallo orgánico repentino ni una enfermedad crítica. Es posible que se tarde bastante tiempo en notar las señales de advertencia. Los síntomas comunes de una tiroides poco activa son:

  • Sentirse cansado todo el tiempo.
  • .

  • Picazón en los músculos y en las extremidades, especialmente en las piernas.
  • Sentirse especialmente sensible a los cambios de temperatura.
  • Sentirse especialmente sensible al frío.
  • Sentir la piel y el cabello secos y escamados al tacto.
  • Bajo estado de ánimo y depresión.
  • Aumento de peso o dificultad para perderlo por mucho ejercicio que se haga.
  • .

Los problemas de peso son los que suelen poner de manifiesto el hipotiroidismo. Si come de forma saludable y hace ejercicio con regularidad pero parece que sigue ganando peso, merece la pena hablar con un médico. Además, muchos médicos de cabecera te pedirán un análisis de sangre si te presentas con depresión. La relación entre el hipotiroidismo y la salud mental se ha hecho cada vez más evidente en los últimos años.

 

Causas y tratamiento del hipotiroidismo

La mayoría de las veces, una tiroides poco activa es hereditaria. Si uno de sus padres vive con la condición, es probable que la herede. Sin embargo, el hipotiroidismo también puede provenir de la glándula tiroides atacada por una enfermedad. Además, algunos pacientes hipertiroideos desarrollan posteriormente hipotiroidismo como resultado de la medicación o el tratamiento.

Afortunadamente, el tratamiento del hipotiroidismo es relativamente sencillo. Su médico le recetará levotiroxina, un comprimido que debe tomarse una vez al día. Esta receta reforzará la producción de hormonas y equilibrará la tiroides poco activa.

Como resultado, sus síntomas se controlarán y su cuerpo responderá. Sin embargo, puede haber un periodo de prueba y error antes de encontrar la dosis adecuada. Deberá someterse a una serie de análisis de sangre durante los primeros 6-12 meses de su diagnóstico.

No hay ninguna razón por la que alguien con una tiroides hipoactiva no pueda llevar una vida plena y activa. Si sigue tomando Levotiroxina, su cuerpo responderá adecuadamente. Sin embargo, utilizará esta medicación de por vida, así que asegúrese de mantener siempre una receta actualizada.

Preocupaciones serias de la tiroides

La mayoría de las veces, un problema de tiroides se debe a hiper o hipotiroidismo. Sin embargo, en ocasiones el problema puede ser más grave. La glándula puede tener dificultades para funcionar debido a un mal funcionamiento de la hipófisis o a un tumor canceroso.

Teniendo esto en cuenta, no tarde en pedir a un profesional sanitario que investigue un posible problema de tiroides. Esta podría ser la diferencia entre un tratamiento rápido y sencillo o una cirugía invasiva.